Ponemos la leche a 37 °C y agregamos la levadura, dos cucharadas de harina y una de azúcar y revolvemos muy bien. Dejamos reposar por 15 minutos a que la levadura se active.
En la batidora ponemos la harina, sal, azúcar y agregamos el huevo y comenzamos a batir. Enseguida agregamos la vainilla y la mantequilla y continuamos batiendo.
Finalmente agregamos el prefermento que hicimos con la leche y la levadura y batimos entre 8 y 10 minutos hasta formar una masa elástica.
Una vez formada la masa formamos una bola y la dejamos en un bowl reposar, tapada en un lugar tibio, aproximadamente por una hora y media hasta que doble su volumen.
Para hacer la cobertura de la rosca procesamos el azúcar glass, harina y mantequilla junto con la vainilla. Procesamos hasta obtener una mezcla homogénea y reservamos.
Una vez que la masa leudo la volcamos sobre una superficie enharinada, y la extendemos a formar un rectángulo. Cubrimos el rectángulo con mantequilla con ayuda de un pincel de cocina y ponemos encima del azúcar mascabado. Finalmente agregamos los frutos secos.
Enrollamos el rectángulo a formar un rollo y una vez tenemos ese rollo, le extendemos y formamos nuestra rosca sobre una charola engrasada con un poco de aceite.
Ponemos las franjas de cobertura sobre nuestra rosca la cubrimos nuevamente y la dejamos no dar por 30 minutos más.
Una vez haya leudado nuevamente y ya con el horno caliente a 180 °C, vamos a barnizar la rosca con un huevo batido a cubrirla con azúcar perla y decoramos con cerezas.
Finalmente horneamos nuestra rosca por 30 minutos o hasta que esté doraditas de la parte de arriba. Sacamos y dejamos enfriar completamente antes de partir.